El regreso de Huenchulaf

Un atado de crónicas desesperadas

lunes, junio 25, 2007

El último cordero

Comer cordero, en algunas zonas de Chile, especialmente en el centro, se ha convertido en una suerte de estrategia gastronómica-preventiva para evitar dolencias posteriores. El vino tinto y la hora de la ingesta son factores a considerar. A muchos, el cordero les cae mal, por lo grasoso, por la contundencia de su sabor.
Este fin de semana, un accidente doméstico puso en el tapete este tema, otra vez. Juan Díaz Castro, de 69 años de edad, era el encargado de matar al cordero que se convertiría en el asado que animaría esa noche, la del sábado, en su casa de la población José Miguel Carrera, de Talca.
Tras aplicarle estocadas claves, el animal agónico se resistía a morir. Con su súper cuchillo, ultra afilado, Díaz se aprestaba a darle el "tiro de gracia". Con la última dosis de energía, el cordero estiró una de sus patas y le pegó a su verdugo, quien cayó al suelo y se enterró el cuchillo, su cuchillo.
De todas maneras, la Fiscalía ordenó investigar más detalles por el riesgo de que la puesta en escena no tiene nada que ver con el cordero.

miércoles, junio 20, 2007

El misterio del lago que desapareció




Hace tiempo que no pasaba algo que realmente me estremeciera. Sucedió a fines de mayo, pero recién esta semana se convirtió en noticia. Funcionarios de Conaf -Corporación Nacional Forestal- confirmaron la desaparición del agua del lago Témpanos, ubicado en el límite norte de Magallanes.




Las fotos son escalofriantes pues comparan el paisaje austral antes y después de lo inexplicable, dejando vacía una enorme cavidad de 30 metros de profundidad. Bueno, hasta ahora hay una razón: una fisura en el fondo provocada supuestamente por los sismos de Aysén. Eso habría provocado un efecto tapón que dejó escurrir el agua hasta secar la cuenca.


Como si se tratara del guión de una película de los años 50, esas con marcianos invadiendo la Tierra con naturalidad irrisoria, el descubrimiento fue realizado por funcionarios de Conaf encargados del proyecto Huemul, para conservar la especie presente en el Escudo Nacional.


El monitoreo es mensual, pero en mayo los fiscalizadores no alcanzaron a esa zona. Ahora lo hicieron y casi se van de espaldas. Es un hecho que comenzarán a surgir interpretaciones variadas, las que de seguro seguirán apareciendo en este blog. Esto recién comienza, señores.


lunes, febrero 19, 2007

Clippy nunca pegó



Hoy supe del deceso de Clippy. Hoy también supe que ese clip expresivo con ojos que aparecía como ayuda en Office se llamaba Clippy. Diez años vivió en casi todos los computadores del mundo y ahora, como un papel viejo y arrugado, se jubila. Desaparece.

Dos reflexiones me provoca el retiro de la figura aparentemente servicial y buena onda. La primera: nunca fue una figura empática. Por más que se esforzara en mover los ojos tratando de dar dosis de humanidad en el frío ambiente virtual, el monito importunaba.
Además, es chocante lo desechable que puede llegar a ser la industria computacional, que mueve miles de millones de dólares, y que produce y mata íconos con una rapidez de banda ultra ancha.
Jensen Harris, uno de los responsables principales del Office, aseguró que "Clippy es una de esas cosas que fractura a los usuarios de un modo muy pasional y muchos están tristes por verlo ir. A algunas de esas personas les gustaba tener un perro o un gato animado en su escritorio y había otras a las que les gustaba tener la ayuda que brindaban. Existe un número igual de personas que lo veían como algo molesto".

martes, noviembre 14, 2006

Nunca le dé cerveza a un elefante

Una manada de elefantes ebrios pisoteó hasta matar a tres personas de una misma familia, tras beber una cerveza de arroz depositada en barriles en un pueblo tribal de Assam, en el noreste de la India.

Según informaron funcionarios citados por la agencia india
IANS, la manada, formada por 24 elefantes, enloqueció y derribó la choza donde se encontraba la familia, después de penetrar en el pueblo y beberse la cerveza.

Testigos dijeron que los aldeanos intentaron espantar a la manada tirando petardos y tocando los tambores, aunque sin éxito.

miércoles, noviembre 08, 2006

Por fin: Juicio por accidente nuclear en celulosa

Casi un año después, la nueva justicia decidió entablar un juicio por el accidente radioactivo en la celulosa Nueva Aldea. La fiscal Ana María Aldana presentó una acusación formal por daño nuclear y negligencia en contra de dos altos funcionarios de la contratista ITC.

Lautaro Domínguez Ferrer y Sergio Pérez Valdés fueron acusados por el Ministerio Público como responsables de la pérdida de una cápsula de iridio la noche del 14 de diciembre de 2005, y que al otro día causó quemaduras graves a un trabajador y menos graves a otros cuatro.


La fiscal Aldana pidió una pena de tres años y un día por el daño nuclear por negligencia, mientras el Juzgado de Garantía de Coelemu debe fijar la fecha de inicio del juicio por el accidente.

martes, agosto 01, 2006

El hombre radiactivo volvió a Chile


El isótopo de iridio es la pesadilla de Miguel Ángel Fuentes, el obrero que sufrió graves heridas por haberse expuesto a radiación en la construcción de la celulosa Nueva Aldea. El joven estuvo medio año en un exclusivo hospital francés, curando sus complicadas lesiones.

Hace unas semanas volvió a Chile, lo que en vez de mejorar su futuro, lo empeoró. El hombre radiactivo dio una entrevista al diario chileno La Nación.

"El Miguel Ángel de antes versus el de ahora cambió en un ciento por ciento. No puedo hacer nada. Mi vida quedó parada. No puedo trabajar. No puedo caminar mucho porque me agito ni tampoco viajar largas distancias. Estoy haciendo empeño para salir adelante, de a poco. No se sabe aún si podrá volver a trabajar".

"Como me pasó a mí, le podría haber sucedido a más personas. Esto fue una negligencia laboral. La culpa la tienen en parte las empresas que mandan a trabajadores no capacitados a operar con material radiactivo. No sé qué clase de permiso tenían. Por otro lado, Celco debe saber a qué empresa está contratando. Cuando pasó el accidente, nosotros estábamos trabajando contra del tiempo. En Echeverría Izquierdo nos decían que teníamos que trabajar rápido porque teníamos que entregar lo antes posible. Trabajábamos siete días de corrido y a veces hasta tarde".

-¿Cuánto tiempo cargaste el isótopo en tu bolsillo?
-Anduve con eso como 25 minutos. Cuando me di cuenta, lo boté por una cañería inoxidable que hay cerca de las oficinas de los jefes. Creo que después recogieron el elemento radiactivo, porque a mi me trasladaron de inmediato al policlínico de la planta Nueva Aldea. Como estoy con licencia de la Mutual, me pagan mi sueldo, de 300 mil pesos, y la empresa me da 80 mil pesos mensuales para pagar mi arriendo (...) Lo único que sé es que si vuelvo a trabajar, nunca volvería a entrar a una celulosa. No sé si podré retomar mi vida normal. Todo depende las próximas operaciones. Por lo pronto, nunca más podré beber ni fumar. No puedo exponerme al frío ni tampoco resfriarme, porque me puede dar neumonía o me puedo pescar cualquier enfermedad.

lunes, julio 31, 2006

La receta trotskysta anti delincuencia



La delincuencia y la seguridad ciudadana me aburren, pese a que suceden casos escalofriantes. Lo que me hastía es la majadería.
Por eso escribo esto. Lo decidí el día en que me topé con www.clasecontraclase.cl , sitio que divulga la vida y la obra Leon Trotsky. Allí también hay comentarios contingentes y recetas para solucionar problemas capitalistas como la delincuencia.
Aquí va.
"Las salidas que proponen los políticos patronales.El Gobierno pretende darle solución al problema, combinando un plan de asistencia social (los llamados planes de empleo para los jóvenes en riesgo social), con un fortalecimiento de los mecanismos represivos del Estado, tanto desde el punto de vista de los “insumos” (más carabineros, más instrumentos de represión), como desde el punto de vista de la gestión, (la creación del Ministerio de Seguridad Pública, que se tramita en el Congreso). La derecha se enerva exigiendo más “mano dura”, sacando a los “ciudadanos” a las calles, y llegando a propuestas delirantes como lo fue en su momento la isla-cárcel de Lavin. Cualquiera sea la línea que predomine, el resultado será el mismo: reprimir a los delincuentes (y tal vez darles ciertas posibilidades de rehabilitación) sin atacar la causa de la delincuencia.¿Cuál es esta causa? El sistema capitalista en su conjunto. Este sistema permite que mientras hay millones de hombres que deben trabajar jornadas que bordean las 12 horas, hayan otros que terminan siendo lanzados fuera del mundo laboral, una parte de los cuales termina descomponiéndose socialmente, comenzando a robarle tanto a los pobres como a los ricos, para subsistir y costearse lujos innecesarios.Frente a esta miseria y descomposición, los trotskistas de Clase contra Clase lucharemos en las filas de la clase trabajadora, por un reparto de las horas de trabajo entre ocupados y desocupados, sin baja del salario, y por eliminar la propiedad privada de los medios de producción, que impiden que los medios de vida y culturales satisfagan -acorde a sus necesidades- a todos los miembros de la sociedad, lo único que hará innecesaria la delincuencia".